Qué extraña es la sensación.
Descubrir un día que,
no solo la mente tiene
recuerdos.
Que también la piel, tiene
su memoria.
Sentir que, un simple roce,
te devuelve:
- lo más sentido,
-lo perdido,
-lo que creíste olvidado.
Mi piel, a tu contacto hoy,
se eriza de nuevo.
Ella, te ha reconocido.
Carmen.M.G